El propósito de zafrán es mejorar el mundo a través de una alimentación que nutra a las personas, regenere la tierra y repare los tejidos sociales. ¿Se puede mejorar el mundo comiendo animales? ¿Cuál es nuestra posición frente al veganismo (como filosofía), el vegetarianismo (como forma de comer) o la ganadería (con sus impactos asociados)?
No estamos seguros, ni tenemos una única opinión, porque somos un equipo diverso, con múltiples miradas. Sabemos que usamos sólo un ingrediente de origen animal en nuestras recetas (la miel). Es un hecho que no tenemos planes de sumar ningún otro ingrediente de origen animal. Y, aunque no adoptamos la filosofía vegana como marca, coincidimos en que una receta honesta no debe provocar sufrimiento animal. También nos esforzamos para llegar a los siguientes acuerdos esenciales .
7 Mandamientos provisorios
(abiertos a la discusión)
1- Comer menos carne, incentivamos por cuestiones nutricionales reducir a por lo menos la mitad el consumo de carne en la Argentina, que en nuestro país está entre los 4 más altos del mundo para que sea concordante con las Guías Alimentarias para la Población Argentina (GAPA), en base a una dieta de 2000 kcal diarias alrededor de dos veces a la semana carnes rojas (o 500 gramos semanales).
2- Comer muchas más plantas, indisociable de la reducción en el consumo de carne alentamos el aumento del consumo de proteína vegetal, que es insuficiente según los estudios nutricionales. Esto se traduce en todas las decisiones, el portfolio de alimentos (al que se sumó una línea de semillas, legumbres y frutos secos en envases compostables), la elección de las recetas que compartimos en redes (muy mayoritariamente sin carne), en la participación como socio adherente (y difusión de valores) de la Asociación de Productores de Alimentos Base de Plantas…
3- Producir más vegetales (y más responsablemente): en este punto a las ventajas nutricionales sumamos el impacto ambiental y social. No hablamos de “ganar más hectáreas” al monocultivo extensivo sino que promovemos la agricultura familiar local, con cuidado de la vida (agroecológica, biodinámica, regenerativa u orgánica), la diversificación de las economías regionales y de la alimentación (sumando nuevas plantas como por ejemplo legumbres).
4- Desalentar la producción agroindustrial de carne. Apuntamos a que se produzca menos y de un modo más responsable. Por eso apoyamos únicamente la Ganadería Regenerativa. Desalentamos la ganadería con lógica industrial (las mega-granjas, el feedlot, el hacinamiento, el frigorífico, el matadero, etc.) responsable de deforestación, emisiones y enfermedades. Pero, como la FAO, creemos que la ganadería regenerativa puede ser carbono positiva e integrarse con buenas prácticas (por ej. el cultivo de pasturas y la rotación, la protección de la fauna local) y en un nueva lógica sustentable.
5- Respetar las tradiciones pastoriles. Quizás el ejemplo más nítido sea el de la Bioregión del Noroeste Argentino, con las vicuñas, ovejas y llamas pastando en la puna, que son fuente de mantas, ponchos, lácteos y carne. Éste ganado produce eficientemente proteínas para muchas familias, se alimenta desperdigado en terrenos que no son aptos para otra actividad, consolida los vínculos comunitarios y contribuye al arraigo de muchas familias. En zafrán tratamos de aprender de éste saber ancestral y apoyamos la autodeterminación de los pueblos originarios, que incluye su relación con el reino animal en todas sus formas.
6- Divulgar la ética vegana, zafrán no es una marca vegana, por lo expuesto anteriormente, pero es muy amiga del veganismo. Ofrece alimentos veganos y en todas sus líneas sólo tiene un ingrediente de origen animal: la miel. Considera bueno para la sociedad en su conjunto que ganen resonancia las ideas veganas (compartidas por una parte del equipo). Pero las divulga como visiones positivas y empáticas complementarias, nunca como denuncia o señalando desde pedestales morales.
7- Comer considerando el interser o la inter-dependencia. Existimos (y dejamos de existir) porque otros seres existen. La proliferación desmedida de especies (8000 millones de personas y 1500 millones de cabezas de ganado) provoca la extinción de otras. Los estudios de biomasa muestran que hoy las personas con sus animales domésticos pesan 10 veces más que todo el resto de los animales salvajes del planeta (elefantes, ballenas, jirafas, lobos, pájaros, chimpancés, etc.). Por eso, tratamos de producir recetas que cuiden la biodiversidad y compensen ese desequilibrio.
Más sobre nuestra posición La langosta es el único animal que seguimos matando en la cocina (zafran.com.ar)