Mejorar la alimentación es un concepto complejo. Cada persona tiene su metabolismo y sus necesidades y lo que es “saludable” para uno puede no ser “saludable” para otro. Hay gente que piensa que tal dieta es mejor que tal otra, hay veganos, vegetarianos y también cuasi carnívoros. Cada uno elige cómo comer.
Nuestra propuesta es volver a la naturaleza, a los ingredientes, a las recetas en vez de las fórmulas. Preferimos hablar de buenos hábitos más que de dietas. Creemos que cocinar va a ser siempre mejor que comprar comida empaquetada, que comer una fruta o verdura fresca es siempre mejor que una galletita. Pero también entendemos que los alimentos envasados pueden ser mejores. Para nosotros, eso significa, pocos y buenos ingredientes integrales, en lo posible orgánicos, sin exceso de azúcar, grasa y sal, sin corservantes, saborizantes o colorantes agregados. Recetas honestas, no fórmulas secretas.